Abogado

ABOGADO

En realidad, es mejor para ustedes que me vaya porque, si no me fuera, el Abogado Defensor no vendría. En cambio, si me voy, entonces se lo enviaré a ustedes;  (Juan 16:7 NTV)

Cuando pienso en un abogado, pienso en alguien que me puede defender. Alguien que está parado junto al acusado apoyándolo cuando se presenta en una corte.
Los abogados generalmente son caros, especialmente los que son buenos en lo que hacen.
Hay abogados buenos y hay abogados malos.
Hay abogados justos y hay abogados tramposos.
Unos defienden a los justos y otros defienden a los criminales.
Hay abogados ineficaces y otros muy habilidosos y conocedores, que ejercen con gran efectividad su profesión y son reconocidos por todo el país.
¡Qué bendición que el Señor Jesucristo nos mandó al Espíritu Santo como nuestro abogado!
Nuestro abogado, el Espíritu Santo, sabe mucho más que cualquier hombre en esta tierra.
Nuestro abogado, el Espíritu Santo, está de nuestro lado para defendernos y no para condenarnos.
Los servicios de nuestro abogado el Espíritu Santo para nosotros son gratis, porque el costo ya fue pagado cuando Cristo murió en la cruz del calvario por mí y por ti.

En realidad, es mejor para ustedes que me vaya porque, si no me fuera, el Abogado Defensor no vendría. En cambio, si me voy, entonces se lo enviaré a ustedes; (Juan 16:7 NTV)

Piénsalo:
¿De qué manera has mirado los beneficios de nuestro abogado defensor?
¿Qué caso necesitas poner en manos del Espíritu Santo?
¿Por qué estás agradecido de tener al Espíritu Santo?