Estas promesas también son mías

ESTAS PROMESAS TAMBIÉN SON MIAS

Y ahora que pertenecen a Cristo, son verdaderos hijos de Abraham. Son sus herederos, y la promesa de Dios a Abraham les pertenece a ustedes. (Gálatas 3:29 NTV)

Este día, la Escritura simplemente me recuerda que yo también tengo acceso a las promesas y bendiciones que Dios le dio a su pueblo Israel.
No necesito haber nacido judío para tener acceso, ya que en Cristo tengo acceso a la bendición de Dios para Abraham y sus descendientes.

Y ahora que pertenecen a Cristo,… la promesa de Dios a Abraham les pertenece a ustedes. (Gálatas 3:29 NTV)
… la promesa que Dios hizo de dar toda la tierra a Abraham y a sus descendientes no se basaba en la obediencia de Abraham a la ley sino en una relación correcta con Dios, la cual viene por la fe. Rom. 4:13 NTV

No necesitamos haber nacido judíos, porque en Cristo no hay diferencia.

Ya no hay judío ni gentil, esclavo ni libre, hombre ni mujer, porque todos ustedes son uno en Cristo Jesús. (Gálatas 3:28 NTV)

Y ahora que pertenecen a Cristo, son verdaderos hijos de Abraham. Son sus herederos, y la promesa de Dios a Abraham les pertenece a ustedes. (Gálatas 3:29 NTV)

Yo creo que, en esta vida, incluyendo hoy, seré bendecido para ser de bendición.

Haré de ti una gran nación; te bendeciré y te haré famoso, y serás una bendición para otros. Bendeciré a quienes te bendigan y maldeciré a quienes te traten con desprecio. Todas las familias de la tierra serán bendecidas por medio de ti». Gen. 12:2

¡Estas promesas también son mías!

Piénsalo:
¿Ya le perteneces a Cristo?
¿Tienes una relación correcta con Dios?
¿Te has apropiado de las promesas de Dios para tu vida?